La propuesta de vinos diseñada e implementada el año pasado en Explora Patagonia, Explora Atacama y Explora Rapa Nui es una original y variada selección realizada por Héctor Vergara, el único Master Sommelier de Latinoamérica, cuyo objetivo es invitar a los viajeros a descubrir el territorio chileno.
Vinos chilenos, con sentido de origen y de excelente calidad son algunas de las características que tienen en común los vinos de esta carta que incluye 13 alternativas. Algunas más clásicas como el Cabernet Sauvignon, Chardonnay y la cepa insigne de Chile, el Carmenere; y otras menos tradicionales como el Sauvignon Gris o Carignan. “La persona que viene a Torres del Paine o Atacama, quiere tener una experiencia de lo nuestro. No es ninguna gracia, por ejemplo, que le ofrezcamos un foie gras de Francia porque eso ya lo han visto y probado en otros lados”, comenta Vergara justificando por qué nuestra carta incluye exclusivamente vinos chilenos.
Junto con la carta de vinos que está incluida en la tarifa, se implementó una renovada selección especial con 15 vinos que van desde los 25 dólares a los 400 dólares para aquellos viajeros interesados por explorar la oferta vinícola del país.
De la mano de estos cambios, vino el rediseño de la carta que los viajeros ven a la hora de elegir con qué acompañar sus comidas. Se trata de una carta que incorpora el mapa de Chile y que recorre desde el valle de Limarí hasta el valle de Malleco, aprendiendo de cepas y las características del territorio que dieron vida a los vinos que se ofrecen.
Otras características de los vinos de la carta
Además de ser chilenos, todos los vinos de esta selección tienen, según Vergara, una particularidad. “En este negocio, hay una cantidad de vino que es bueno, respecto del cual yo no voy a dar mayores explicaciones, diré que es bueno, que me acompaña comidas, pero no puedo decir mucho más. Hay otra cantidad de vinos, en cambio, que sí tiene sentido de pertenencia de un lugar, de los cuales sí es posible contar una historia; y nosotros hemos hecho lo posible justamente por plasmar eso en la carta.”
Para este experto, el sentido de origen es una tendencia mundial. “No pasa solo con el vino, también sucede con los alimentos, con la música, con el arte, con muchas cosas. Lo que tiene sentido de pertenencia, indudablemente tiene un valor agregado.”
En Chile, esta tendencia ha ido de la mano con el redescubrimiento de cepas ancestrales en el valle del Maule (VII séptima región de Chile) y de cepas que no se valoraron y que ahora reviven como el Carignan, que se incluyó en la nueva carta de vinos.
Otra de las características que el experto destacó como común a los vinos del menú fue la exclusividad. Desde su punto de vista, que algo sea exclusivo “no pasa por ser algo inalcanzable para la gente, sino que es algo de pequeña producción, que no lo vas a encontrar en todas partes y sobre todo es calidad”.